jueves, 8 de septiembre de 2011

Comparecencia de Largantza en el Gobierno Vasco.

 

COMPARECENCIA DE LARGANTZA Y SU PRESIDENTE
JUANTXO DOMINGUEZ EN EL PARLAMENTO VASCO.-

En relación a la petición de una regulación en el País
Vasco, de los denominados Centros Terapéuticos.
(Comisión de Sanidad del Parlamento Vasco a 2 de Abril de

2008).

En la actualidad el fenómeno sectario, se caracteriza por su extremo polimorfismo, así como por una constante adaptación a las fluctuaciones de nuestra propia sociedad. El reclutamiento a lo que comúnmente se conoce por "sectas" y qué a otros niveles se comienza a denominar, como grupos de manipulación psicológica, ejerce fácilmente su actuación entre personalidades frágiles, sin suficiente espíritu crítico pero también sobre personas cultivadas que no encuentran respuestas a sus inquietudes. Atraídas por promesas de bienestar, de plenitud, de "curación" son cuestiones por las cuales es muy fácil participar en estos grupos. Actualmente en nuestra Comunidad Autónoma Vasca aspectos relacionados con las nuevas terapias psicológicas y naturales, enmarcadas en lo que se conoce como "desarrollo del potencial humano", están sirviendo como auténticas pantallas a diversas entidades y personas (sin escrúpulos), que pretenden ir de "alternativas" en el campo de la salud, con el consiguiente perjuicio de los profesionales acreditados (medicina, enfermería, fisioterapeutas, psicólogos, etc.).
Este ejercicio ilegal, está originando innumerables problemas a muchas personas que desde LARGANTZA podemos certificar. Desavenencias familiares, gran dependencia hacia estos embaucadores, problemas financieros, agravamientos de la personalidad, descontrol en aspectos de la salud. En nuestra sociedad acomodada, constatamos la insatisfacción que genera la aceptación de nuestras enfermedades. El recurso a otros tratamientos, mediante manipulaciones o fármacos distintos así como el uso de "nuevas medicinas" científicamente no demostradas en la curación de dolencias, están al orden del día.



Lo mismo ocurre con la psicología. ¿Podemos tratar nuestros estados
melancólicos con un tratamiento psiquiátrico?
Al psicoanálisis le pasan factura sus divisiones internas, los largos períodos de tiempo y el dinero que hay que invertir en él, así es que para conseguir escucha y consuelo mucha gente se conforma sin comparar otras posibilidades a su alcance, con cualquier "psicoterapeuta autoproclamado".Los peligros que esta entraña, no se tienen en cuenta por personas necesitadas de una rápida solución a sus problemas de salud. Si fracasa el tratamiento no será por las carencias científicas de estos "falsos terapeutas", envestidos en Universidades inexistentes, con currículums imposibles y titulaciones sin ningún código deontológico, sino porque a nosotros nos falta fervor para el "milagro" se produzca.